Curso Manejo de residuos clínicos y hospitalarios (REAS) 30 hrs

El manejo de residuos hospitalarios (REAS) se refiere a las prácticas y procedimientos utilizados para manejar, tratar y eliminar de manera segura los desechos generados en hospitales y otras instalaciones de atención médica. Estos residuos pueden incluir materiales peligrosos y no peligrosos, como desechos médicos, químicos, radiactivos, y desechos generales (como papel y cartón).

El manejo adecuado de los residuos hospitalarios es crucial para proteger la salud pública, el bienestar de los trabajadores de atención médica y el medio ambiente. Las prácticas de manejo incluyen la segregación, el almacenamiento, el transporte, el tratamiento y la disposición final de los residuos.

Características clave del manejo de residuos hospitalarios:

1. Segregación: Los desechos se clasifican y separan en el punto de generación según su tipo (por ejemplo, residuos infecciosos, punzocortantes, químicos, farmacéuticos, radiactivos, y residuos generales), lo cual facilita su tratamiento y disposición adecuados.

2. Almacenamiento seguro: Los residuos se almacenan en contenedores apropiados, etiquetados y a prueba de fugas, para minimizar el riesgo de exposición y contaminación.

3. Transporte adecuado: Los residuos se transportan de manera segura dentro y fuera de la instalación de atención médica, siguiendo normativas específicas para prevenir accidentes y la liberación de contaminantes.

4. Tratamiento: Antes de su disposición final, algunos residuos, especialmente los infecciosos y peligrosos, requieren tratamientos específicos para neutralizar riesgos. Los métodos comunes incluyen la autoclave (para desechos infecciosos), el tratamiento químico, la incineración, y métodos físicos para desechos punzocortantes.

5. Disposición final: La eliminación de los residuos se realiza de acuerdo con las normativas locales e internacionales, asegurando que no representen un riesgo para la salud o el medio ambiente. Esto puede incluir el enterramiento en vertederos sanitarios controlados o la incineración en instalaciones especializadas.

La gestión eficiente de los residuos hospitalarios requiere políticas claras, formación continua del personal involucrado, y un seguimiento y evaluación periódicos para garantizar la seguridad y el cumplimiento de las normativas ambientales y de salud pública.